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Hay muchos tipos de organizaciones. Podemos separar en dos divisiones principales: las organizaciones existentes para crear beneficios (organizaciones sin fines de lucro. Incluye las entidades empresariales) y las organizaciones que existen primordialmente para otros fines (organizaciones no lucrativas. Por ejemplo: organizaciones de caridad).

3 Tipos de entidades comerciales y sus características comunes:

1. Empresas individuales.

Las empresas individuales son negocios que son propiedad y operados por una sola persona: el único propietario. El propietario y el negocio, es entonces el mismo. A efectos fiscales, una empresa unipersonal no es una entidad fiscal, y los beneficios obtenidos por la empresa son gravados en el retorno de la persona. El titular debe desarrollar un sistema de contabilidad que distingue entre sus asuntos personales y el de la empresa.

2. Asociaciones.

Las asociaciones son las empresas que son propiedad de dos o más personas. Para pequeñas sociedades, el acuerdo es a menudo un acuerdo verbal entre los interlocutores, pero es altamente recomendable que el acuerdo se formalizó como se hace en las grandes asociaciones como empresas de contabilidad pública y la mayoría de bufetes de abogados. Al asociarse con individuos en el pasado, sentí que era importante la enumeración de la división de los beneficios y gastos, así como las responsabilidades que se esperan de los socios en un acuerdo escrito.

3. De Sociedades Anónimas.

Una corporación es una entidad organizada bajo las leyes de un estado en particular. Eso significa que puede entrar en acuerdos contractuales en su propio nombre. Ellos son identificables por la existencia de acciones.

Hay ventajas y desventajas de cada uno de estos tipos de entidades de negocios. Y cada uno se adapta a la misma actividad en las diferentes etapas de su crecimiento. Para la mayoría de las artes, entretenimiento y contratistas independientes, es probable que empresas individuales y sociedades que son más comunes para su uso.

No entidades comerciales

La mayoría de las entidades comerciales están organizados para atender las necesidades de diversos segmentos de la sociedad. Ejemplos de estas entidades no comerciales son los hospitales públicos, las escuelas públicas, la policía y el ejército. Todas estas entidades se distinguen por la falta de un propietario identificable. Debido a esto y el carácter no lucrativo de estas organizaciones, sus sistemas de contabilidad son modificados para ajustarse a sus actividades. El tipo de contabilidad que utilizan se denominan contabilidad de fondos.